No basta con tener el equipo de protección personal adecuado: su efectividad depende del uso correcto y de un mantenimiento del EPP regular. En este artículo te explicamos cómo alargar la vida útil de los EPP, evitar errores comunes y garantizar que siempre funcionen cuando más se necesiten.
- Uso correcto del EPP:
• Capacitación: Asegúrate de que todos los trabajadores reciban formación sobre el uso y colocación correcta del equipo.
• Inspección diaria: Antes de cada jornada, revisar visualmente si hay daños, deformaciones o desgaste.
• Ajuste adecuado: Un EPP flojo, roto o mal colocado pierde efectividad.
• Compatibilidad: Verifica que los distintos elementos (casco, gafas, mascarilla) funcionen bien juntos. - Mantenimiento del EPP:
• Limpieza regular: Lava guantes, gafas y mascarillas reutilizables con productos adecuados.
• Almacenamiento: Guarda los equipos en un lugar seco, limpio y protegido del sol o sustancias corrosivas.
• Reemplazo programado: Cada EPP tiene una vida útil. Respeta las fechas de vencimiento o reemplaza tras un daño.
• Reparación o descarte: Si un equipo está dañado, no lo repares improvisadamente: cámbialo. - Errores comunes al usar EPP:
• Usar mascarillas sin sellado adecuado.
• Colocarse cascos sin ajustar la banda interna.
• Compartir EPP entre trabajadores sin limpieza previa.
• Desconocer el uso específico del equipo (por ejemplo, usar guantes químicos para cortar materiales).
Conclusión:
Un EPP bien usado y cuidado salva vidas, reduce el riesgo de accidentes y representa un ahorro a largo plazo. Implementa una cultura de responsabilidad y mantenimiento en tu empresa para garantizar la seguridad de todos.
